1.3. La Huida y el Inspector (The Escape and the Inspector)#
No puedo salir por la puerta principal. Veo las luces azules de la policía reflejadas en el escaparate . Si salgo ahora, estoy muerto . O peor, estaré en una celda de la comisaría de Via Laietana. Y en Via Laietana, los detenidos a veces “caen” por las ventanas.
Miro alrededor del almacén desesperadamente. Hay una ventana pequeña en la parte alta de la pared trasera. Está cubierta de telarañas. Soy viejo. Tengo 45 años, fumo dos paquetes al día y bebo demasiado . No soy un atleta olímpico. Pero el miedo es una gasolina muy potente. Me da energía.
Muevo una caja pesada de enciclopedias debajo de la ventana. Subo a la caja. Mis rodillas protestan. Abro la ventana. Está dura, oxidada. Empujo con fuerza . Crak. Se abre . Escucho golpes en la puerta principal. —¡Policía! ¡Abran la puerta!
Salto por la ventana y caigo al callejón trasero. Caigo mal. Me golpeo el hombro contra el suelo de piedra. —¡Joder! — grito en silencio . Me levanto . Mi pantalón está roto en la rodilla y sangro un poco . No importa . Corro. Corro rápido por las calles oscuras del Barrio Gótico .
Llego a la plaza de la Catedral. Hay muchos turistas mirando la arquitectura y muchas palomas volando bajo . Me mezclo con los turistas. Camino más despacio ahora. Respiro fuerte . Mi corazón late como un animal atrapado en mi pecho . Bum, bum, bum. Necesito un trago . Necesito calmarme.
Voy al bar Marsella. Es el refugio perfecto. Es el bar más antiguo de Barcelona. Las paredes están amarillas por el humo de cien años. El techo es alto y el suelo es de madera vieja y sucia . Aquí nadie hace preguntas.
Entro . El bar está casi vacío . Carmen está detrás de la barra . Ella tiene cincuenta años, el pelo teñido de rojo y una sonrisa cansada pero amable. Ella sabe que soy un desastre. —Hola, guapo — dice Carmen mientras limpia una copa. —¿Estás corriendo una maratón? Estás sudando como un pollo y sangras por la rodilla. —He tenido un accidente, Carmen. Ponme una absenta. Doble. Y no me hagas preguntas. —¿ Problemas ? —Siempre. Mi vida es un problema.
Carmen pone un vaso en la mesa, una cuchara con un terrón de azúcar, y la botella de agua. Hago el ritual. Echo el agua sobre el azúcar. El líquido verde se vuelve blanco lechoso. Bebo. El sabor es fuerte, a anís y hierbas amargas. Me quema y me calma al mismo tiempo.
Pienso en el hombre muerto en la librería . ¿Quién era? Seguramente el dueño. ¿Por qué estaba muerto? ¿Dónde está la chica francesa, Solange? ¿Y dónde está Javier, el niño rico ? ¿ Tienen el manuscrito?
De repente , la puerta del bar se abre violentamente. La luz de la calle entra . Y con la luz, entra una sombra grande. Es un hombre gordo. Lleva un traje gris caro, pero le queda pequeño. Lleva gafas de sol oscuras, aunque estamos dentro de un bar oscuro . Es el Inspector Morales.
Él me ve inmediatamente. Sonríe. Tiene los dientes amarillos. Es una sonrisa de tiburón que huele sangre . Morales camina hacia mi mesa. Camina despacio, disfrutando el momento. Se sienta en la silla frente a mí. La silla cruje bajo su peso. Sin pedir permiso, coge mi vaso y bebe mi absenta.
—Hola, Beltrán —dice con voz grave. —Ese era mi vaso, Morales. —Ahora es mi vaso. Todo en esta ciudad es mío si yo quiero , basura .
Morales enciende un cigarrillo negro. Tira el humo directamente en mi cara. —Te vimos cerca de la calle Petritxol, Beltrán. Un vecino vio a un hombre con tu… aspecto elegante. —Yo estaba paseando. Soy un turista en mi propia ciudad. Me gusta el chocolate. —No me mientas —golpea la mesa con el puño. —Hubo un “accidente” en la librería Lletraferit. El dueño, el viejo Señor Valls. Alguien le metió un cuchillo en la tripa. —Qué triste. Barcelona es una ciudad peligrosa . —Sí. Muy triste. Dicen que el viejo Valls guardaba cosas. Libros prohibidos . Y algo más valioso. Un manuscrito antiguo.
Morales se inclina hacia delante. Huele a colonia barata y a tabaco rancio. —Escucha bien, borracho. No sé qué haces, pero ten cuidado . Esa librería era un nido de ratas comunistas y revolucionarios. Si te encuentro allí otra vez, o si descubro que sabes algo del manuscrito, vas a dormir en la cárcel Modelo. Y en la Modelo, los accidentes ocurren cada día. —Entendido, Inspector. Soy una tumba.
Morales se levanta y se arregla la corbata. —Ah, una cosa más. El Generalísimo Franco está muy mal. Va a morir hoy o mañana. Cuando él muera, habrá caos. Muchos piensan que será la libertad. Pero la policía siempre manda. Con Franco o sin Franco. No lo olvides.
Morales sale del bar sin pagar . Miro el vaso vacío. Tengo tres problemas grandes ahora: Un chico desaparecido que quizás es un ladrón. Un librero muerto. Y el Inspector Morales, que quiere colgarme.
Carmen viene a mi mesa con otra copa de absenta. Esta vez invita la casa. —Ese hombre es el diablo —dice ella con miedo. —No, Carmen. El diablo tiene más clase. Morales es solo un perro con placa.
Necesito saber qué era ese “manuscrito”. Y necesito encontrar a Solange antes que Morales. Salgo del bar Marsella. Es de noche cerrada. Las luces de neón rojas y verdes del Barrio Chino se encienden. Barcelona es bonita de noche. Bonita, sucia y peligrosa. Como una mujer fatal.
Voy a caminar hacia la Universidad. Los estudiantes siempre saben dónde esconderse.
Vocabulario (Chapter 3)#
- Telarañas: Spiderwebs
- Rodillas: Knees
- Piedra: Stone
- Teñido: Dyed
- Pollo: Chicken
- Cuchara: Spoon
- Terrón de azúcar: Sugar cube
- Lechoso: Milky
- Amargas: Bitter
- Tripa: Gut / Belly (Colloquial)
- Colonia: Cologne
- Rancio: Stale / Rancid
- Nido de ratas: Rat’s nest
- Placa: Badge (Police badge)
Grammar Note#
- Conditional: “Si salgo ahora, estoy muerto” (If I leave now, I am dead - First conditional).
- Future Tense: “Estaré en una celda” (I will be in a cell), “Habrá caos” (There will be chaos).
- Reflexive Verbs for Emotion/State: Me calmo (I calm myself), Se arregla (He fixes himself/his tie).